Joseph me miro a los ojos. Aquella mirada reflejaba el sufrimiento, era evidente que había soportado los días de mucho dolor durante mi ausencia, me sentí culpable porque era la causante de tanto daño.
-No quiero que te vuelvas a ir de mi lado -No conseguí encontrar las palabras adecuadas para reconfortarme. Mil y un pensamientos vieron a mi mente, todos y cada uno de ellos eran sobre como consolar su pobre corazón. Por un momento me pregunté qué sería de mi vida sin él.
-Cada vez que pienso en ti, tengo muchas dudas sobre nuestro nuestro, sobre lo que pasa con nosotros y nuestra familia si alguien se llega a un enterar. Tengo miedo de que nuestro padre pierda la empresa por nuestra culpa y también ...
Sus labios besaron con suavidad cada centímetro de la piel del escote de mi vestido
