Por la mañana no me quiero ni mover de su cama pero tras vaguear un poco me termino levantando. Sorprendentemente he dormido genial, mucho mejor de lo que lo hubiera hecho estando sola en mi habitación comiéndome la cabeza por lo que tendré que afrontar hoy. La ropa de Nick me cae encima y mientras arrastro los pies escaleras abajo me da miedo enredarme y caerme de boca. Pensaba que ya estaríamos solos pero lo escucho hablar con sus padres y me quedo clavada al úlitmo escalón. Me debato en si volver a subir a hurtadillas. —Mañana es Noche Buena y nos vamos a sentar todos en la misma mesa —dice Johan, su padre. —Nadie piensa que lo hayáis hecho mal, cariño —Frida siempre tiene las mejores palabras. —Si fuera así no me hubiera buscado anoche. No es justo que se hable de algo de lo que no

