Es un poco más de mediodía cuando King me deja en mi departamento. Fue una noche y mañana muy interesante que me ha ayudado a dejar de pensar tanto las cosas y solo dejar que las cosas pasen. Como el bien dijo no le hacemos daño a nadie. Abro la puerta de mi departamento, dejo mi abrigo y bolso junto a las llaves en la mesa de la entrada antes de salir de mis sandalias y avanzar hasta el salón donde encuentro a Blue sentada en el sofá del mismo con un bote de helado extra grande, su cabello castaño claro está en un moño desordenado y viste ropa de gimnasio. —Vaya, estuvo buena la follada —dice sin verme y lame la cucharilla. —Sí, bueno, después te doy detalles —replico, y me acerco hasta sentarme junto a ella en el sofá. —¿Vas a contarme que te sucede? —Sucede que soy una imbécil —mur