Nilo Ya que esta noche Josh estaría por fuera con Elio atendiendo a los estudiantes en una reunión, decidí trabajar horas extras para adelantar los pendientes que tenía atrasados por el viaje a Sicilia, me sorprendió que el padre Monteiro decidiera hacer lo mismo, pero no me molestaba en absoluto. —¿Padre? —toqué la puerta e ingresé al obtener su permiso—. Ya están listos los informes que solicitó con las estadísticas —me senté en lo que él revisaba las carpetas—. ¿Desea que le pida algo de cenar? Está tarde y no quiso ir al comedor. —Tienes razón —contestó al revisar la hora—. ¿Qué te parece si vamos a algún lugar? Tú tampoco has cenado por estar trabajando. —Estoy bien, alcancé a comer una manzana hace un rato. —Eso no es una cena. Vamos, permíteme al menos compensarte las horas ex