Oz Me levanto y veo que ya son las tres de la tarde, tengo dolor de cabeza y nuevamente esa sensación de frustración se apodera de mí, voy a la cocina para buscar algo de comer, no sé si estará levantada, pero prefiero no molestarla si es que está durmiendo, así que opto por evitar cualquier inconveniente, ya bastante fue con lo de esta mañana. Preparo algo rápido y reviso mi agenda de esa semana, siempre me gustó mi profesión, pero este cargo de director es demasiado aburridor, prefiero más estar en acción en el quirófano que detrás de un escritorio todo el tiempo. -¿Dormiste bien?- Levanto mi vista y allí está ella con una camiseta sin mangas y un pantalón corto, se nota que no trae ropa interior. Siempre he sido un hombre amante de los detalles, es por eso que las cirugías se me da