Ryan O’ Conell. Todo el tiempo que seguí a Dylan hasta su nueva casa, Annabelle no dejó de parlotear sobre mi interés en Alessandra y que debería ponerme en su lugar, ayudarla a separarlos para que nosotros pudiéramos estar con quien queremos. En un primer momento, cuando me mencionó esa loca idea, apreté el volante entre mis dedos y tomó toda mi fuerza de voluntad para no sacarla del auto y dejarla tirada. La sola mención de traicionar a mi hermano, me puso de mal humor. Puede que la relación no sea la mejor, pero no llegamos a ese nivel de problemas. Sin embargo, me contuve. Primero, porque quería mostrarle lo que ahora son Alessa y Dylan, un jodido matrimonio en todo el sentido de la palabra. Y segundo, porque luego lo pensé mejor y me vino una idea a la cabeza. No confío en Annabel