Harvey sintió que había algo más en las palabras de Cindy, estaba a punto de preguntar cuando una criada ayudó al semiborracho Cyrus Ross a entrar en la sala de estar.
Harvey frunció el ceño al ver a Cyrus y simplemente dijo:
—Mamá, me voy ya.
Dicho esto, se dio la vuelta y pasó junto a Cyrus para salir.
Cyrus frunció el ceño, pero no dijo nada.
De vuelta en la villa, Harvey llamó a su secretario, Michael Parkin, y le ordenó comprar una mansión a nombre de Jordyn.
Michael sonó sorprendido.
—Señor Ross, si la señora Ross se entera…
—Sé discreto, que nadie lo sepa, especialmente Danica.
Si Danica descubría que Jordyn iba a tener el bebé, estaría aún más decidida a divorciarse de él y solo pensarlo le provocaba a Harvey una sensación de inquietud.
—De acuerdo, entiendo.
Al finaliza
