BECCA
12:04 a.m. Domingo - diciembre
Pasaba de media noche, cuando llegué por fin a casa.
En cuanto abrí la puerta de la casa, un hedor muy fuerte a pintura concentrada con otras sustancias me dio la bienvenida. La casa se encontraba apagada, con las únicas luces entrando por las ventanas.
- Hola, Clara. Lamento la demora, pero me entretuve con un amigo. - Deje la bolsa de papel sobre la mesilla del recibidor.
Como era evidente nadie me respondió. Me adentre a la sala, donde el hedor se hizo mucho más fuerte.
- ¡Auch! - Chillé cuando sentí algo duro chocando con mi pie. Una lata de pintura.
- Creo que no hay nadie en casa. - Susurré.
Subí las escaleras, pisando cada peldaño con cautela. Llegué a mi habitación, las luces estaban apagadas, la ventana se encontraba abierta. Dejé mi bo
