No puedo decir que me inquietaba ver a Pablo pero sí que era algo que no me gustaba para nada, y mucho menos después de discutir de la manera en que lo hacía con mi madre por su causa y de remover tanto polvo de un pasado que cada día estaba más segura de querer dejar pisado y enterrado. Además, me resultaba bastante incómodo darme cuenta de cosas como que yo iba conduciendo un coche maravilloso, que seguramente muchas veces hablamos de tener juntos en un futuro y que había conseguido tener con mucho esfuerzo, amor por mi trabajo y horas dedicadas a formarme y a ser mejor cada día, y ver que él tenía uno similar pero que pertenecía a su actual pareja, quien se lo había regalado a cambio de tiempo, atención, mucho se. xo desenfrenado y sobre todo, de fingir que tenían una relación maravill