—Después de lo acontecido estaba realmente devastado, no podía creer lo que paso, la verdad me retiré de palacio con mucho dolor y me dirigí de nuevo al desierto como te dije huyendo de lo que había pasado —Raneb hablaba con dolor en su voz, Elia ahora comprendía mejor a Raneb y podía comprender por sus acciones que en realidad era una persona amable, solo que había vivido cosas muy duras. —Entonces ¿como obtuviste los poderes que tienes ahora? ¿los encontraste en el desierto mientras viajabas? —pregunto Elia viendo que Raneb reaccionaba riendo pero con una expresión de tristeza en los ojos. —Hubiera preferido que así fuera, la verdad fue que después de un tiempo cuando volvimos a Shayra... * Otra vez aquí, al menos ahora los recuerdos de esas personas no me atormentan, sus gritos y la