Mitos del Futuro: El Despertar de los Perdidos

Guarida

Nicole y su nuevo grupo caminaron hacia el interior del bosque por bastante tiempo, en todo el trayecto, para sorpresa de ella misma, no dijo ni una palabra, solo se limitó a observar su entorno, y aunque fuera de noche, el lugar no le parecía tenebroso, al contrario, sentía que les daban la bienvenida.

Siguieron avanzando hasta llegar a una montaña, en esta había una cascada de gran tamaño y altura, en su base se había formado un estanque no muy grande, la luz de la luna iluminaba lo suficiente como para que se pudiera ver todo aquello en medio de todos esos grandes árboles, pero no mucho.

—Que hermosa cascada —dijo Nicole maravillada por lo que veía además que no estaba cansada en absoluto.

—No es una simple cascada —dijo Snack a Nicole. Snack le hizo un gesto a Londer, este tomando un amuleto que llevaba lo puso en la palma de su mano, levanto este amuleto y acto seguido un crujido empezó a sonar, algo se movía, Nicole vio como la cascada se abrió como accionado por algún mecanismo, aunque no escucho ninguno.

Este acto a su vez hizo que un camino apareciera de la nada en el estanque, además que había abierto un sendero que mostraba había algo más en el interior de la cascada.

—Esta es la entrada a nuestra guarida, el lugar donde se reúnen los mejores de todas las tribus, fue creada para defendernos de extranjeros, vamos, te mostrare el interior cuando lleguemos te sorprenderás —dijo Snack emocionado a Nicole, mientras Daya miraba con el ceño fruncido a la recién llegada.

Entraron al pasaje que se había creado con bastante normalidad, menos Nicole que iba curioseando y tocando la cascada que estaba abierta.

Siguieron caminando y entraron en lo que era un pasaje largo, húmedo y oscuro, esto si no le gustaba mucho a Nicole.

Luego Londer activo algo dentro, lo que hizo que se cerrara la entrada, Nicole se puso nerviosa por esto, pero aun con todas decide seguir y mantenerse alerta por lo que pase, Londer tomo algo de la oscuridad, Nicole pudo observar algo que chispeo, esta chispa prende lo que tenía Londer, era una antorcha, con ella el grupo avanza más seguro.

—Vayan con cuidado, recuerden que el suelo es resbaladizo aquí —dijo Londer con una voz algo cansada.

Al seguir el camino Nicole pudo divisar una subida, pero no vio luz al final de esta.

—Pues de momento es muy deprimente, la guarida es una cueva —Dijo Nicole a Snack.

—Solo un poco más y te sorprenderás, ten paciencia chica de fuego —respondio Snack a Nicole en tono desenfadado.

Y solo segundos después de decir esto logran ver una entrada, la abren y luz les golpeo en la cara, cuando los ojos de Nicole se acostumbraron a la luz pudo ver la guarida, era un valle cubierto por completo por montañas, no era muy grande, había varias construcciones de madera, no, había muchas construcciones de madera, solo que Nicole no se dio cuenta a la primera porque había muchas incrustadas en las montañas y subían hasta su pico.

También vio que había dos cascadas en un lado que hacían un pequeño estanque, y que había varias personas entrenando, en definitiva, más que una guarida parecía un pueblo pequeño con una distribución planificada.

—¿Qué te parece?, ¿no te dije que te sorprenderías? —pregunto Snack a Nicole que le codeaba el hombro con una sonrisa en el rostro.

—¡Hey, miren, es Snack! —grito uno de los que estaba practicando. De inmediato varias personas se acercaron, juntaron y lo saludaron, varios se extrañaron por Nicole.

—¿Trajiste una prisionera? —pregunto uno de los que había llegado corriendo a Snack, con clara sorpresa en su voz y en su rostro.

—Nada de eso, esta chica se llama Nicole y viene conmigo, era prisionera de los intrusos, así que la libere y la traje conmigo —respondió Snack a los que estaban ahí, en su voz se notaba la confianza que tenía.

—Snack, que bien que sigues vivo, mande a Londer y Daya a rescatarte, pero no sabía si solo esos dos podrían lograrlo, pero que impresionante hazaña, y dices ¿esta chica era prisionera?, no es de ninguna tribu, no debería estar aquí —dijo Krug, el líder de la alianza a Snack, un joven alto y fornido, con un rostro duro, y en lo que Nicole respectaba algo feo, a diferencia de Snak, que era delgado, esbelto y con rasgos finos, Krug vio con mucha sorpresa la llegada de Snack.

—Disculpa ¿Cómo te llamas? —dijo Nicole a Krug.

—Soy Krug, hijo de Nuntuk, líder de la alianza de tribus, y futuro Jatnan de mi tribu —dijo Krug alzando el pecho.

—Pues Krug, que descortés eres, ¿no te enseñaron a ser amables con los invitados?, ni siquiera me has dado algo de beber, me muero de sed, también tengo hambre, que haces que no traes nada. y sigues ahí parado, al menos invítame a pasar a su comedor ¿no? —decía Nicole regañando a Krug. Todos en la guarida estallaron de risa por lo que vieron y escucharon.

—Ahora lo ven, ella tiene espíritu, encaja aquí a la perfección —decía Snack a todos, que aun reía por la escena. A pesar de que Krug apretaba los dientes de la rabia, parecía que a todos los demás les agradaba Nicole.

—Tú la atenderás y veras por ella Snack, y si llega a ser una espía va a ser tu culpa —decía Krug que se había puesto rojo por lo sucedido, retirándose luego de decir esas palabras.

—¿Qué acaba de pasar? ¿Por qué todo el mundo se puso a reír? —Pregunto Nicole a Snack bastante confundida.

—Bueno, Daya te explicara eso luego, primero vamos a comer que tengo hambre igual que tu —respondió Snack a Nicole mientras se tocaba la barriga y fruncia un poco el ceño.

—Bien, te seguiré solo porque yo también tengo hambre y sed —dijo Nicole a Snack con voz altiva.

Fueron al comedor de la guarida a paso ligero, Snak, Londer y Daya entraron a la cocina y Nicole se quedó fuera, ella vio que todo era de madera, el piso, las paredes, el techo, y viendo esto, Nicole se quedó extrañada, no porque todo sea de madera si no por no ver una mesa, vio unas rocas afuera y actuó.

—Hey, ustedes que están ahí sentados, ayúdenme —dijo Nicole a cuatro jóvenes que estaban sentados esperando la comida, ellos extrañados solo siguieron lo que decía Nicole.

—Muevan esas rocas gigantes, y pónganlos como yo digo —ordeno Nicole con voz de mando, los jóvenes siguieron al pie de la letra lo que decía, y mientras más personas iban llegando, más se unían a hacer la mesa, y en poco tiempo, la mesa que Nicole quería ya estaba hecha.

Bueno, una mucho más grande, se había hecho con tablas de madera que había cerca, y uso las grandes piedras que había afuera como base, lo que no sabía era que esas grandes piedras iban a ser usadas como base para un horno de piedra, aunque si lo hubiera sabido igual las hubiera utilizado.

—Muchas gracias muchachos, su bondad será pagada algún día, no sé por quién, pero seguro que lo será —Dijo Nicole a los jóvenes que la habían ayudado.

—¿Qué hacen?, traigan esos troncos y siéntense aquí —dijo Nicole otra vez indicando que hacer a los jóvenes.

Snack que estaba en la cocina con Daya y Londer, salieron a ver porque tanto alboroto, y vieron la mesa recién hecha, una mesa de enormes dimensiones con muchas personas, los jóvenes de las diferentes tribus sentados a su alrededor, los recién llegados se extrañaron al verlos a todos juntos, ya que muchas tribus no se llevan bien con otras aun así ahí estaban.

—¿Qué es esto? —dijo Snack a todos, apuntando a la mesa improvisada que habían hecho.

—Se llama mesa Snack —dijo Nicole respondiendo a Snack orgullosa de lo que había hecho.

—¿y para qué sirve? —dijo Snack aun extrañado a Nicole.

—Para que el comer sea más cómodo —decía Nicole sin darse cuenta que ellos no entendían mucho lo que decía.

—Trae aquí ese plato —dijo Nicole a Snack que no sabía lo que decía, pero mientras él pensaba ella tomo el plato y lo puso en la rudimentaria mesa que habían hecho.

Al hacerlo les mostro como se comía en ella, y todos empezaron a imitarla, Snack quedo fascinado viendo como con su carisma pudo hacer que hombres de varias tribus la siguieran y hasta hiciera lo mismo que ella sin ser de las tribus, Snack vio esto como una oportunidad sonriendo por esta visión.