Emanuel.
—¿Podés apagar esa canción? —le pido a Ramiro con exasperación, tomando el último trago de mi segunda cerveza. Se le dio por escuchar reggaetón y con todas canciones significativas, como la de ahora, "Desde esa noche" de Thalia y Maluma.
—Pero me da miedo enamorarmeeee, de tiiii —canta en una pésima afinación y bailando con movimientos pélvicos. Resoplo y niego con la cabeza, pero no puedo contener una sonrisa—. Vamos, Ema, antes eras buena onda. Hubieras hecho los movimientos pélvicos conmigo.
Suelto una risotada y me vuelvo a servir.
—Es cierto, pero ahora ni loco. Ya andas metiendo esa pelvis por otros lados... —bromeo dando un trago a la bebida.
—Vale es perfecta en todos los sentidos —dice sentándose a mi lado con un suspiro de enamorado. Uf, lo perdí—. No puedo dejar
