¡Qué noche de mierda! Me digo a mi mismo mientras voy dando vueltas por el colchón para tomar mi móvil que está en la mesita de noche al otro lado de la cama. No he dormido en casi toda la noche esperando que se comunique. Miro la pantalla y nada. No ha dado señales de vida, y de verdad que me estoy preocupando demasiado. ¿Y si de verdad le ha pasado algo? Me pregunto. Me levanto de la cama, me coloco el pantalón corto que deje tirado sobre el sofá anoche, uso el baño, y bajo a la sala para desayunar e intentar nuevamente comunicarme con ella. Estoy llegando a la cocina cuando escucho mi última canción "No Vaya a Ser" sonando. El ruido proviene del jardín y sin pensarlo dos veces salgo al jardín para ver qué ocurre; Terral sigue mis pasos hasta el jardín y para mi sorpresa hay una mesa pr