— Meli vámonos –se me acerca molesta, siempre suele ser tan amargada — No seas aguafiestas, vamos a divertirnos un poquito más –me rio y la invito, buscando con la mirada al pelinegro- Jared ¡ven aquí! Abi ha llegado por ti ¡baby! –mi cuerpo se tambalea y caigo sobre el sofá, riéndome de todo y de nada — Meli, por favor compórtate – La amo, amo su timidez y la inocencia que desprende pero también la odio, le tengo celos… ¿Por qué ella y no yo? — Ay Abi, Jared es un excelente chico y tú deberías corresponderle de inmediato –le insisto borrando mis estúpidos y negativos pensamientos sobre ella- debes estar con él ¡pero ya! –tomo mi copa de golpe para creerme mi mentira y le pido al camarero otra — No, ya se acabó la fiesta para ti –enarca una ceja con evidente molestia y sé que de

