Narra Alexandre Mi estadía en Alemania me ha servido para ordenar mi cabeza. En realidad en mi Sede en Berlin no había ningún problema, sólo fue una excusa que utilizé para alejarme de esa mujer endemoniadamente hermosa. Esa mujer que no sale de mi cabeza ni de día ni de noche. Quise olvidarme de todo con muchas de mis amantes y lamentablemente el plan no ha salido cómo yo lo esperaba. Me ha sido imposible hacerlo, cuando estaba con mis amantes el único rostro que se venía a mi cabeza era el de ella. ¡El de ella! Deseo a esa mujer como nunca había deseado a nadie. Y lo que más me hace desearla es el saber de que ella es alguien que está fuera de mi alcance. Que ella no es como las mujeres que suelo frecuentar. Cierro los ojos con fuerza. Otra vez pensando en ella. Los abro para apa