— Oye tú, no voy a permitir que… — Atenea interrumpió a Gabriela, pero Ares se metió entre ellas antes de que algo pasara.
— Yo creo que si deberías de quedarte despierta para que estés con nosotros Gabriela — La susodicha lo miró con sus ojos entrecerrados — Lo digo para que Artemisa quiera quedarse con nosotros y no esté preocupada por ti.
— Pero si ella no quiere hacerlo, en serio no creo que se lo mejor el… — Gabriela la interrumpió al notar lo que estaba intentando hacer.
— ¿Saben qué? Claro que sí, me quedaré aquí con ustedes — Pablo sonrió de oreja a oreja mientras que las otras dos mujeres que se encontraban en el lugar simplemente rodaron sus ojos al no estar contentas con esa decisión.
— Iré por Apolo — Atenea se apresuró en hablar antes de que alguien más soltara una palabra
