Ares se quedó en silencio para cortar la conversación y no seguir con lo que estaban hablando. Después de unos minutos en completo silencio, Sasha se dio cuenta que ya no iba a obtener respuesta por parte de Ares, así que se decidió por apretar sus labios y negar con su cabeza al no estar conforme con su postura. Mientras en ese coche se sentía toda la tensión posible por parte de las tres personas en el lugar, en la camioneta de Apolo todo se encontraba en completo silencio ya que la mayoría de ellos estaban dormidos. — ¿No te vas a dormir? — Apolo observó por el espejo retrovisor a Artemisa quien se encontraba observando por la ventana todo el paisaje — Deberías de hacerlo para que recuperes toda la fuerza de la semana. — No puedo descansar — Suspiró aún con su mirada puesta en el

