Capítulo 50

1134 Palabras

Isabel Me salvó la campana. Porque estaba claro que si algo o alguien no nos interrumpía en ese momento, íbamos a acabar besándonos otra vez, así que vino de maravillas. Y estaba tan nerviosa que no recordaba dónde había dejado el móvil, así que me levanté como una completa demente a buscarlo en mi bolso y, pensando que hasta podría ser del hospital, respondí sin mirar de quién se trataba. Para cuando descubrí que se trataba de Kate, ella me estaba contando algo como loro, y yo apenas podía concentrarme en los gestos de Marco, quien me estaba diciendo que se iba a la cocina a hacer café para los dos. -          ¿Me estás escuchando lo que te estoy contando? – preguntó al ver que no le respondía - ¿Isabel? ¿Estás allí? -          Si, amiga, perdona. Es que estoy en casa de Marco – sus

Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR