Ya se encontraban de vuelta en su apartamento, Angela estaba ahí para su amiga, Johann se había encerrado en su despacho como solía hacer cuando se desbordaba en trabajo, tampoco era como si le gustará escuchar a su prometida hablando de uno de sus rivales, claramente ya no era un rival porque él y Sara estaban prometidos, no habría vuelta atrás, sería un gran escándalo si se separarán estando ya prometidos ante el público. Él no podía evitar pensar en todo eso, aunque sabía que su relación con Sara había mejorado en muchos sentidos, ahora ella estaba allí pero con su amiga Angela, lo que ellos tuvieron no había sido relevante, sin embargo Johann recordaba a cada una de sus sumisas, cada una de ellas le dio una poca de experiencia en su rol como Dom, y aunque con Sara había empezado como