—Debido a los acontecimientos de los últimos días, el consejo decidió…, la pena de muerte. Los murmullos dentro de la sala no se hicieron esperar, mientras que Tanya lloraba con fuerza, esto no fue lo que ella quiso, se había enamorado de Sirhan, siempre fue demasiado terca con lo que deseaba y eso la llevó a ese destino tan cruel. —Se levanta la sesión. Sirhan se puso de pie y salió de aquel lugar sin detenerse por los gritos de suplica de esa mujer, para él, ella no merecía ni un poco de compasión. (Unos días antes…) Los huesos de Sirhan empezaron a crujir con fuerza, verlo convertirse en lobo siempre era todo un espectáculo. El rey Morat no se quedó atrás y de un momento a otro, dos enormes lobos se miraban con furia, listos para luchar, mostrando sus filosos colmillos. Co