POV Luca.
Despedirme de Eva ha sido el momento más surrealista de mi vida hasta ahora. Todos sabíamos que el momento llegaría, pero de igual forma no estábamos preparados. La mujer que vio por nosotros y fue una constante en mi vida desde que nací ya no está. Y es jodidamente doloroso, una sensación que solo he sentido cuando el Nonno partió hace años. Eva siempre cuidó de mí y alentó mis locuras. También me consoló y dio mis tirones de oreja cuando los necesité.
Flashback.
—No es bueno albergar tanta rabia bambino —susurra Eva cuando me ve sentado en la silla frente a mi computador. Me doy la vuelta y la miro para encontrarla inclinada, sosteniendo un vaso con leche haciéndome sonreír. —Esa es la sonrisa que me gusta ver en ti mi niño —cuchichea ahora porque— ¿no te dejas curar ese gol
