Bajo del coche de Elliot y miro la entrada de la discoteca. La verdad es que llegamos media hora tarde porque me había demorado demasiado en maquillarme. Observo a Superman ponerse a mi lado y le sonrío. Empezamos a caminar hacia la entrada de la discoteca en la que hemos quedado con los demás y nos ponemos en la pequeña cola que hay. - ¿De qué van los demás? -Pregunta Elliot. - La purga, o eso me mencionó Sarah. - Me gustan más los nuestros. Y es que, ambos éramos fans de las películas de superhéroes, por lo tanto, Superman y la mujer maravilla no podían faltar. Una vez dentro de la discoteca, observo como las mesas son rectángulos que rodean la pista de baile y la barra. Ya hay mucha gente allí y miro a Elliot por si él ve a su hermana. Me agarro a su brazo cuando empezamos a pasar