Al día siguiente, me levantó al punto de las nueve de la mañana, sintiéndome culpable por haber sido tan inocente ante un Carusso, si mi padre se entera de ello seguro que estará muy decepcionado de mi. Mientras me cambio la pijama pienso que esta experiencia no debe quedar en el olvido sino que debo aprender de mis errores. No puedo confiar en nadie, al menos no en las palbrs de un Carusso por muy esperanzador qué suene. Me digo a mi misma qué lo mejor sería no mencionarle a nadie mi encuentro con Julius Carusso y en cuento a Vittoria, lo mejor sería explicarle qué no llegue a ningún acuerdo con él, puede que ella me exija saber el motivo y aunque me gustaría decirle la verdad, creo que ella no es más que otra víctima de ese hombre, no quiero que se sienta responsable por haber estado