Durante el camino hacia la escuela de Lu, mis padres y yo nos hemos puesto al día con todo lo que ha acontecido en nuestras vidas. Mi padre me ha contado de los proyectos en los que se encuentra trabajando como ingeniero, y mi madre acerca de su nuevo trabajo como psicóloga en uno de los mejores hospitales del sur de la Florida. Por supuesto que yo les he contado detalles de cómo fue que Lu llego a mi vida y también de Mar, de lo que hace, de su familia, en fin… digamos que este tiempo nos sirvió para hablar de cosas que nos hacían falta y que hacen que nos entendamos más como familia. Lo único malo, es que mi hermana Mariela todavía no pudo venir para que así estuviéramos los cuatro juntos.
—Es una bonita escuela— Comenta mi madre mientras que estamos parados frente a la puerta esperando
