Adara estaba sentada en el techo de la torre más alta del palacio, observando la ciudad, vigilándola, ya que varios incendios aparecían cada día, cuando vio a un ave creada con viento, aparecer frente a ella. Aquella ave se posó en su mano, su padre siempre las usaba para comunicarse con ella cuando se encontraba en el campo de batalla, era mejor que cualquier nota o mensajero, ya que solo podía recibirla otro mago de viento. Adara la acercó a su oído y las palabras que aquella ave le susurro le helaron la sangre, Erodan, su reino, su hogar, estaba bajo ataque y no de cualquier ataque, si no de todos los reinos vecinos, todos se habían unidos para conquistar Erodan. Adara saltó de lo alto de la torre y voló al palacio principal. Liam estaba regresando de la ciudad cuando ella saltó don

