Al atardecer el rey Isaac y su ejército se encontraba en posición, esperando a que el enemigo llegara, lo cual no tardarían mucho en hacerlo, según la información que tenían al día siguiente tendría su primer encuentro, la batalla daría Inicio. Sila se quedó mirando a la distancia, preocupada por si Terran no podría con él fragor de la batalla, ella sabía que él era fuerte, pero muchos se quedaban paralizados en el campo de batalla, ante los ojos de la muerte. Sila dio un largo suspiro mientras miraba al cielo. — Mañana será un largo día. Esa noche Sila no pudo conciliar el sueño. Uno de los soldados se acercó y le dijo. — El ejército del reino de Brules se está acercando. — ¿Qué tan cerca están? — Están atravesando las montañas, llegarán aquí al mediodía. — Sigue vigilando, avísam

