Ya veremos. Al llegar al hospital, seguí a Anne, hasta que la llevaron a una sala dentro de urgencias, me sujeté el pecho y miré que ya traían a Jack, su madre no quiso despegarse de él, hasta que la hicieron soltarlo, pues iba a entrar a urgencias también. Nos quedamos ahí, ella y yo, mirándonos y llorando por la misma razón. La abracé y traté de darle el consuelo qué no podía tener ni yo misma, y de pronto, mi fuerza se esfumó. —¿Iris?. Empecé a llorar como una bebé al ver a mi madre, ella se acercó a mi con un rostro preocupado y me abrazó con fuerza. —¿Estás bien?, ¿Qué haces aquí?—Preguntó sin entender nada.. —Mamá…— dije con un nudo en la garganta que amenazaba con asfixiarme. —Jack y su hermana tuvieron un accidente, dile a papá que los salve, por favor—Supliqué con los ojos