Cuatro días después: 10 de septiembre Hoy finalmente ha llegado el día en que podré contarle toda la verdad a Mykel, hoy cumple 28 años y estoy segura de que no se olvidara más de este día. Afortunadamente en estos últimos días pude escaparme algunas veces para comprar las cosas que necesito, aunque debo admitir que Sofía fue mi gran cómplice a la hora de cubrirme en la empresa. Con mucho cuidado para no despertarlo, me levanto de la cama y tomo el celular de la mesita de noche y sonrió ampliamente al ver la notificación del cadete diciendo que ya esta llegando con lo que ordene. Rápidamente busco el albornoz, me lo coloco y salgo del cuarto para ir a recibir el pedido. —Justo a tiempo —le digo al chico que trae la inmensa bandeja de desayuno. Él sonríe y ofrece a ayudarme a entrarla,