— ¿Me concederías este baile? –le preguntó Marco a la sorprendida joven Sofía había escogido con mucho cuidado este día para casarse en la gran mansión de los Martinelli y no tenía intenciones de permitirle al pelinegro armar un escándalo en plena fiesta. Ni bien lo vio acercarse a la pelirroja tomó del brazo de Evan para llamar su atención, escuchando un “No te preocupes, no hará nada estúpido” para tranquilizarla. Cómo si eso bastara en una nerviosa novia…. sin embargo confió en las palabras de Evan y observó aquella escena. — Carolina de inmediato mira a Antonio, quien con un semblante más tranquilo solo asiente para darle su espacio con el pelinegro. Marco la lleva hasta la pista de baile, posa sus manos sobre la cintura de la joven y ella, luciendo un poco nerviosa no por lo que M

