Ella volteó a mirar al hombre a su lado, casi se quedó hipnotizada al verlo sonreír con cada una de sus palabras, sintió que se enamoró un poco más al ver la forma en que la miraba, como si fuera algo único y valioso. Amó aquel momento donde cada uno estaba dejando ver su mejor faceta, una donde se dejaban olvidar todo a su alrededor, lo que eran y el motivo que los llevó a estar distanciados. Sólo eran ellos dos contando buenos momentos, disfrutando de su compañía. —¿Qué sucede? —preguntó él al notar su repentino silencio. —Nada —contestó con una sonrisa sincera. —Me encanta cuando sonríes —le dijo alzando su mano para acariciar su mejilla. Ella cerró los ojos un momento, disfrutando de aquella caricia. —Me veo hermosa, ya lo sé —soltó con toque de altanería. Él soltó una lev