Mary se sentó en la sala de estar con la pierna cruzada sobre la otra, esperando pacientemente a que Rose bajara las escaleras. Vio a Lisa en el mini bar al lado del comedor donde estaba leyendo con una botella de vino tinto. La observó en silencio y notó que podía ser un poco amistosa y se acercó a ella. -Oye tú- dijo, poniendo una dulce sonrisa amistosa. Lisa la miró brevemente –hola- Mary se humedeció los labios con su sonrisa aún encendida -¿me recuerdas?- -¿Debería?- Preguntó Lisa sin levantar la vista. -Aunque no realmente- se rió entre dientes -pero yo era la decoradora en el aniversario de tu hermano y también la amiga de tu cuñada, soy Mary-. -Un placer conocerte.- -Está bien, ¿y tú lo estás?- Mirándola, respondió: -Lisa- Mary le tendió la mano y la tomó después de pensarl