Horas más tarde
Puede que vaya a parecer el tonto más grande del mundo, pero estoy nervioso por esta noche. Hace mucho tiempo que no invitaba a una mujer a una cita, hasta ahora todo se había basado en encuentros casuales con mujeres desconocidas buscando acortar las horas de soledad durante la noche. Sin embargo, con Yana quiero que sea diferente, y el solo hecho de darme cuenta de lo que ella me está haciendo hacer, me pone nervioso.
No es que haya acumulado una gran cantidad de ropa durante nuestra estancia en San Remo, pero si fuimos de compras antes de venir para aquí porque los dos sabíamos que no podríamos estar mucho tiempo con las pocas mudas que teníamos. Así que aquí estoy con un pantalón de jean color gris y una camisa blanca que escogí aquel día ya que me pareció algo básico
