Fara estaba disfrutando del baile, todo era maravilloso y Uzziel hacía que todo lo fuera aún más.
Mientras esperaba a que él volviera con algo de beber, pudo ver como varias chicas se acercaron a él. Uzziel era hermoso, sus rasgos eran más feéricos que humanos, por eso llamaba la atención donde quiera que fuera.
Ella se sentía atraída por él, pero no se atrevía a acercarse a él, no de manera romántica. Por eso siempre se aseguraba de no cruzar la línea, de no verlo de otra manera que no fuera como su amigo.
Uzziel volvió con una copa en la mano, se la ofreció y al verla tan pensativa le preguntó.
— ¿Estás bien?
— Si, solo estoy cansada, será mejor que me vaya a descansar.
— Creí que nos estamos divirtiendo.
— Y así es, me la he pasado muy bien, siempre me lo paso bien contigo
