Después de desayunar, Lissana, Uzziel y Fara, emprendieron su viaje al bosque de Hath, donde se encontraba la entrada al reino élfico.
Tras varias horas de viaje, Lissana preguntó.
— ¿Ya vamos a llegar?
Fara chilló y salió corriendo, Lissana y Uzziel salieron corriendo detrás de ella.
— Miren lo que he encontrado.
Dijo mientras señalaba algunas pequeñas setas que crecían en el bosque.
— ¿Setas?
— Si, son comestibles y son deliciosas, así que ayudenme a recogerlos, nos daremos un gran banquete esta noche.
— ¿Esta noche?
— Si, la frontera que lleva al reino élfico aún está lejos, así que tendremos que buscar un lugar donde pasar la noche.
— ¿Qué tan lejos está?
— No estoy muy segura, nunca he medido el tiempo que tardó en llegar.
— ¿Estás segura de que conoces el camino?
— Clar
