Ethan
—¡Rápido, rápido! —gritaba mi mamá emocionada, en el momento en el que ingresamos al cuarto.
—¿Qué pasa? —pregunté con calma.
Mis padres se hallaban sentados en el sofá familiar, mientras que algunas sirvientas buscaban al interior de una caja.
—¡Encontramos unos videos familiares! —gritó feliz mi madre.
—¿Esas cosas existen?
—¡Claro que sí! Antes siempre salíamos de vacaciones…
—Hasta que llegaste a la pubertad —enfatizó mi padre, Aaron.
Sonreí y tomé la mano de Natalie.
—¿He arruinado sus vacaciones? —tiré de ella, pero soltó su mano, para sentarse en el sofá—. He cumplido mi objetivo en la vida.
—No importa, tuvimos unas muy buenas —sonrió Blanca, sentándose entre nosotros, provocando un gruñido de mi parte—. ¿Pasa algo?
—Nada —comenté, aunque a todas luces se notaba qu
