Los Descendientes Queen

10. Secuestrada

Después de explorar mi habitación volví a abrazar a mis padres que me esperaron pacientemente en la entrada.

— Te pareces tanto a mi— sonreí ante las palabras de mi madre que son totalmente ciertas.

— Bueno yo creo que eres una combinación de ambos— asentí queriendo reírme de lo dicho por mi papá, su habitación estaba cerca y también la de Zack la mía es la de en medio, empezamos a platicar, mi madre lloro por haberse perdido desde mi primer balbuceo hasta mi primer día en la escuela.

Mi papá la consolaba al igual que yo pero estaba muy sensible, mi papá pego su oreja al vientre de mi madre.

— Interesante— mire confundida a mi papá.

— ¿Que?— preguntó mi mamá igual de confundida que yo.

— No estas embarazada entonces no entiendo por que estas tan sensible normalmente eres una cab... auch ¿por que me pegas mujer?— me reí.

— Si no fueras mi mate, mi esposo y padre de mis hijos te aseguro que antes de que dijeras la palabra sensible estarías muerto, con un cuchillo traveseando tu garganta de un lado a otro— mi padre palideció, después de un rato de platicar bajamos a cenar y después de la cena subí a dormir por que tenía mucho sueño.

Narra Scott:

Estaba tranquilo en mi oficina viendo los videos de cuando Amaris era una niña inocente y cariñosa, esa chica se ha ganado un gran lugar en mi corazón tanto que hasta me da pena matarla pero como ya saben una Queen viva es un peligro, solo tengo que esperar, esperar a que ella misma mate a sus padre y pele a muerte con su hermano.

Decido llamarla para saber como esta, si la escucho muy borracha tendré que traerla a casa aun que no lo quiera, no responde así que supongo que se la ha de estar pasando bien, apago la computadora y subo a mi habitación para dormir.

En la mañana me despierto hasta tarde, anoche no pude dormir normalmente no dejo que Amaris se quede en casa de ninguno de sus amigos por que me preocupa que sus padres puedan encontrarla así que no dormí muy bien anoche.

Veo la hora y ya son las 2 de la tarde, tal vez ya llego, me meto a bañar y después me visto, me pongo una camisa negra y un pantalón n***o de mezclilla, me pongo unos zapatos y me peino el cabello con los dedos, al verme bien en el espejo noto que necesito sangre con urgencia, salgo de mi habitación, todo esta muy tranquilo.

Al llegar a la cocina abro el refrigerador para ver si aun quedan bolsas de sangre pero no queda ni una sola, cierro el refrigerador y noto que Barnabas está tomando su café.

— Necesito sangre— él asintió y con un chasquido de dedos hizo que apareciera una chica humana de mas o menos 16 años, ella miraba a su al rededor confundida después nos miro a nosotros.

— ¿Quienes son? ¿que hago aquí? ¿como es que llegue aquí?— estaba totalmente pálida del miedo.

— Demasiadas preguntas preciosa— me acerco a ella y al oler su sangre mis colmillos salen, muerdo su cuello con fuerza succionó su sangre, ella gritaba pero nadie la ayudaría, cuando la deje sin una sola gota de sangre me separé del cuerpo inmóvil — Encárgate del cuerpo— iba a salir de la cocina pero entonces hablo.

— Amaris aun no ha llegado— me gire a verlo.

— ¿Ya la has llamado?— asintió.

— Ni ella ni sus amigos contestan— me empece a preocupar, tome mi celular del bolsillo trasero de mi pantalón y busque su última ubicación, cuando la tuve le dije a Barnabas que me llevará inmediatamente ahí, al llegar vimos que era un antro humano, entramos.

— Revisa las cámaras yo preguntaré a los de la barra y mantenimiento— Barnabas desapareció y yo me acerque al chico que estaba en la barra.

— Esta cerrado no hay servicio—

— No vengo a beber— saque mi celular y busque una foto de Amaris y se la mostré — ¿Ella estuvo aquí anoche?—

— Había muchas chicas anoche no la recuerdo— le mostré un fajo de billetes — si ya la recuerdo pero ¿que eres de ella?— me veía como alguien de si edad así que dije.

— Soy su novio, anoche vino aquí con sus amigos, yo no pude venir por temas personales pero no llego a nuestra casa y su celular manda directamente a buzón de voz—

— Pues ella parecía soltera pero si estuvo aquí con un chico y una chica ambos muy pálidos su amiga tenía un nombre similar al de ella pero no lo recuerdo pero de la nada desaparecieron como si se los hubiera tragado la tierra ni siquiera pagaron sus bebidas— realmente parecía que esto último le molestaba bastante.

— ¿Estas seguro?— asintió.

— Los reporte con seguridad pero los de seguridad dijeron que solo los vieron entrar pero que no los vieron salir— suspire y entonces Barnabas apareció a mi lado asustado al humano pero Barnabas rápidamente lo hechizo para que olvidara hasta nuestros rostros y las preguntas que le hice, salimos rápidamente de ahí.

— Esto es malo Scott muy malo, sorprendieron a Amaris y a sus amigos y aun que pelearon se los llevaron—

— ¿Quienes?— pregunte preocupado por que sus padres la hayan encontrado y encima se hayan llevado a dos chicos que pertenecen a mi clan.

— El clan de Black Blood— por una parte me tranquilizaba que se le haya llevado un clan nómada pero por otro no ya que ellos al ser nómadas serán diferentes de rastrear — El líder Julio fue quien se llevo a Amaris, de sus amigos se encargaron sus hombres, borre la grabación por si acaso— asentí.

— Tendremos que tratar de dar con ellos y matarlos a todos sin importar nada, Julio debió averiguar quien es realmente Amaris y seguramente la intercambiara con James para que les den lo que quieran-

— El problema es que yo no puedo saber donde están, su brujo es igual de poderoso que yo, ya estuve tratando de averiguar pero no encuentro nada— tome una larga respiración para tranquilizarme.

— Entonces no podemos depender de la magia para esto tendremos que hacerlo a la antigua, organiza grupos de búsqueda y ponle precio a la cabeza de Julio, pero que lo entreguen vivo— fuimos a la casa y Barnabas empezó a hacer lo que le pedí, mientras yo me fui a mi oficina para llamar a Valentina.

— ¿Scott?— es raro que yo la llame así que entiendo su desconcierto.

— Valentina tenemos un problema tu antiguo compañero eterno se llevó a Amaris, la secuestro— escuche algo de vidrio estrellarse.

— ¿Que? Pero si Julio no sabe quien es Amaris, mucho menos creo que sepa que vivía con nosotros, hace años dejó de importarle todo lo relacionado con nosotros—

— Estaba grabado en una cámara de seguridad de un antro humano, Barnabas fue quien lo revisó así que dudo mucho que el video haya sido alterado—

— ¿Y que hacía Amaris en un antro humano?— entendía su molestia siempre es ella la que me dice que es peligrosa que ande sola por que sus padres o alguien podría reconocerla.

— Yo la deje ir, iba a ir con sus amigos y hasta a ellos se los llevaron— le expliqué.

— ¡Pero si eres un idiota! ¡al menos le hubieras dicho a Barnabas que la acompañara o a ese lobo con el que se va a casar!—

— El chico acaba de entrar a la escuela tenía mucha tarea y no quería que fuera con Barnabas por que él se hubiera puesto a ligar con las humanas y ni siquiera le hubiera prestado atención a Amaris— Barnabas me mira y ambos sabemos que es cierto por lo que rápidamente cambia su mirada.

— Voy a tratar de contactar con Julio para— la interrumpí.

— De ninguna forma vas a hacer eso, ya le puse precio a su cabeza y mande grupos en su búsqueda, Valentina ese ex compañero eterno tuyo nos odia por que tu lo rechazaste por ser un vampiro nómada y dijo que se vengaría de nosotros que buscaría la forma de hacernos pagar—

— Te recuerdo que fuiste tú quien me obligo a rechazarlo yo si quería ir con él pero eso ahora no importa regresaré a casa y juntos buscaremos a Amaris— suspire y colgué.