KEIRA]
(Al dia siguiente)
Los recuerdos de lo vivido anoche no se salen de mi mente, mucho menos todas las palabras que nos dijimos y los besos que nos dimos en esta cama que se ha convertido en testigo de una noche donde hemos pensado a futuro. Pienso que lo conozco hace relativamente poco y por una parte me parece una locura absoluta, pero también pienso en lo que me hace sentir y me doy cuenta de que quiero vivirlo, aunque el miedo por salir lastimada alguna vez me haya hecho dudar, sin embargo, sé que con él esto no ocurrirá. Me giro en la cama intentando abrazarme a él, pero para mi sorpresa no está a mi lado, «¿se habrá ido a trabajar ya?» me pregunto y me siento en la cama. Busco algo con que taparme, hasta que encuentro una camiseta suya color gris sobre la cajonera que tiene aq
