Cuando terminamos de comer la ayudo con los platos y entre los dos organizamos la cocina, cuando ella está secando la encimera, dándole la vuelta para que este de frente a mi la acorraló entre está y yo, mirándola a los ojos puedo ver cómo el deseo se enciende en ellos. - Te amo Stormi – le digo y ella me regala una deslumbrante sonrisa. - ¿quieres casarte conmigo? – ella se sorprende, pero inmediatamente lleva una mano hasta mi cuello y tira de mi hasta juntar sus labios con los míos en beso lleno de respuestas y promesas. - Si, quiero casarme contigo – me responde sonriendo. - No traje un anillo, pero mañana mismo lo compro – le digo y ella levanta su mano izquierda y veo en su dedo corazón el anillo compromiso que pensaba darle hace diez años. -