19

2051 Words

Comenzó a acercarse más y más, jamás había podido resistirme a esa sexy y profunda mirada… excepto por ahora, que no hizo más que impacientarme. —Claro que no caí bajo… —rodé los ojos—, y lo sabes. Si no era así, porque literalmente se estaba muriendo de celos. Me corrí hacia un lado para escaparme de su aprisionamiento, pero fue inútil. —No me digas que ese imbécil te soporta tus caprichos —levantó una ceja. 'Rayos, qué ganas de besar esos rojos labios', pensé, perdida en ellos. —No sólo los soporta… —ahora yo acorté la distancia entre nosotros—, los cumple. Está bien, tal vez no era del todo cierto, o no era para nada cierto, pero Scott no tiene por qué saberlo. Ya que no le diría ‘en realidad estoy sola, porque Eric ni la hora me quiere dar’. Tiré fuerte de mi brazo, logrando que

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD