Dos años después
—¿Cómo se encuentra tu hijo?—expresé deseando saber sobre el estado de salud de su bebé, el pequeño Yakov.
—Mejoró mucho esta semana—respondió con la vista al frente vigilando el pasillo por el qué William caminaria para llegar al balcón qué da a la nueva plaza frente al palacio, donde la gente aguarda para escuchar su discurso después de dos años de la derrota de Cromenia y a un año del nombramiento oficial de la nueva nación. Astrea.
—Es una pena qué Melanie no pudiera asistir, hace mucho que no la veo—aludi algo decepcionada por no lograr ver a mi querida amiga pero debía quedarse en casa para cuidar a su hijo. Él nació siendo prematuro lo que hoy en día le ha ocasionado muchas enfermedades respiratorias y la pobre se queda acompañándolo, viendolo sufrir día a día ha
