Carlos Fontaine. —Estoy embarazada, amor —repite. —Vamos a tener otro hijo. Todo mi mundo se desmorona aún más. Las palabras que me dijo Iván unas horas antes vuelven a mi mente y creo que colapsaré de un momento a otro. Escuchar esto empeora las cosas para mí, para ella, para nuestra familia, para ese bebe que lleva en su vientre. Nuestro futuro es incierto, y aunque él no las amenazó a ellas directamente con palabras, lo hizo con sus insinuaciones y sé que su sed de venganza no tiene límites, que no se cansará hasta dejarme totalmente destruido y por consiguiente a todos a quienes amo. No soportaría si eso sucede, y justamente eso es lo que busca, llevarme al abismo nuevamente en donde su hermana me dejó y de donde salí a duras penas con la ayuda de mi pequeña. Me muero de miedo. M