Buscando a Marcia

Resultados inesperados

Ting 

Escucho el sonido de mi móvil mientras me encuentro en la comida. Veo que es una notificación de twitter así que lo ignoro. 

 Ting 

Vuelve a sonar y echo un vistazo a la pantalla para ver que de nuevo twitter es quien me llama. 

Ting, ting, ting, ting, ting 

Comienza a sonar el móvil como loco, al grado que lo tomo bajo la mirada atenta de las personas que están a mi alrededor, incluyendo mi padre. 

—¿Todo bien León? — Me pregunta. 

—Sí, sólo...— Y me meto a configuración para quitar las notificaciones de la aplicación y vuelvo a dejarlo sobre la mesa. —Lo siento. 

Mi padre voltea de nuevo a ver a las personas con las que estamos comiendo cuando veo la mirada de Mario insinuando algo que no entiendo. Después toma su móvil y con el medio de comunicación que hemos creado me pide que vea el mío. 

La pantalla se enciende cuando veo un mensaje de texto que trae su nombre. Al abrirlo veo en letras mayúsculas y en negritas ¡ESTAS LOCO! Seguido de una captura de pantalla donde había más de cinco mil respuestas al twit que había puesto por la mañana. 

Como si un insecto me hubiese picado en el trasero, tomo el móvil y me pongo de pie.—Regreso enseguida.— Me disculpo y salgo del lugar para irme a recibidor del hotel y leer los mensajes. 

@marcemarc1a yo fui al festival este fin de semana y te recuerdo de la zona VIP. Te mando mi número por DM. 

—¿Qué demonios? — Murmuro al empezar a leer los mensajes. 

@chmarce ¡Ey guapo! Te he andado buscando… ¿DM? 

—¿Será ella? 

@machemicalbrothers ¡Claro que te recuerdo! Mándame DM

—¿O ella? 

@marc1a_marce Tan guapo y buscandome… ¡Qué suertuda! 

—Definitivamente ella no es. 

@marciamars ¡Esa soy yo! Te mando DM. 

—Tal vez ella si. 

Sigo bajando los mensajes que al parecer no tienen fin hasta que siento una mano sobre mi espalda que me hace saltar, al voltear veo a Mario. 

—¡Cómo se te ocurrió! — Me reclama. 

—No lo sé, sólo lo pensé.

—¿Sólo lo pensaste? Ahora tienes a cinco mil Marcias escribiendote ¡cinco mil! 

Vuelvo a ver mi teléfono.— Ya son seis mil. Literal me están llegando tres mensajes por segundo. 

—¡Qué! — Exclama.—¡Ay León! No pudiste olvidarlo… ¿Cómo se te ocurrió? La gente te está enviado mensajes porque sabe quién es León Torreblanca no por que en verdad te quieran ayudar a encontrar a Marcia, además de que ya tiene 1k de retweets, si tu padre se entera de esto, te va a matar. 

—No se va a enterar una porque no tiene twitter y dos porque tú no le vas a decir. Tengo la solución, borraré el tweet. 

—Esa es tu solución… ¡Genial! Eres un genio.— Habla sarcástico.

Él ve su móvil y baja poco a poco todas las respuestas.— Hay otra solución. 

—¿Cuál? 

—¿Haz visto The Bachelor? — Me pregunta y yo volteo a verlo con cara de pocos amigos.—¡Qué! Puede funcionar. 

—Sí, claro… ¿esocgeras a 20 marcias para que vengan a verme y descubrir quién es la verdadera? 

—No, tú las vas a escoger, sólo tú la recuerdas, yo no… diles que te manden fotos… es más ¡abre una cuenta exclusiva! — y me quita el móvil para abrir la app de twitter. 

—¿Qué haces? —Pero él no me hace caso y después de unos segundos comienza a teclear una que otra cosa y luego se queda pensando.— Mario.— Le digo y él sigue hasta que termina y me lo da. 

—Listo. 

—¿Qué hiciste? —Entonces veo una nueva cuenta que lleva por nombre @buscandoamarcia — Primero me dices que es una locura y ¿ahora me haces una cuenta nueva? 

—Sí, como una campaña, la campaña de buscando a Marcia, le das retweet y les dices a las chicas que te manden una  foto. 

—¡Qué! ¿Eso no va a funcionar? Además se ve raro. 

—Claro que si, pones características de la foto, de cara, no sé… y que te las envíen, las ves y las que más se parezcan las llamas y tienes una cita con ellas… puede que la encuentres. 

—Tu plan es ridículo, no va a funcionar.

—¿Dice el que literal subió un anuncio en su cuenta personal? Será el mismo resultado solo más organizado. 

Veo la cuenta que me acaba de hacer y sonrío porque sé que es una locura, pero a la vez me gana la curiosidad de saber si en verdad puede funcionar de esta forma, digo, al final Mario tiene razón, ya lo había hecho y tuvo resultados inmediatos. 

—Sube el anuncio, dale retweet y esperemos, si no funciona, pues… ¿te olvidas? — Pregunta. 

Y con una sonrisa pícara busco la foto que tome horas atrás y lo veo.— Me olvido, lo prometo. 

—¡Excelente! Entonces… hazlo. 

Presiono  Subir foto y de inmediato escribo el mismo mensaje que puse en el tweet anterior y lo envío, después me meto a mi cuenta y le doy retweet para que lo puedan ver. 

Mario hace lo mismo y antes de enviarlo pone “mi amigo en verdad está muy enamorado de esta Marcia, ayúdenlo. Estamos buscando a Marcia ¿A caso serás tú?” y después sin escribir más presiona enviar. 

—Ahora sí León… veamos si el destino juega de tu lado.— Habla mientras veo lo que acabo de hacer con un poco de esperanza.