Jules.
Veo a Nathaniel moverse de aquí para allá, en menos de dos horas a caminado frente a mi escritorio por lo que fácil habrían podido ser veinte veces, el hombre esta hecho un desastre, se ve nervioso, ansioso, como si algo anduviera mal, quizá se debe tan solo a la presencia de Adler, o la misma Alessandra
Aunque he llegado a creer que de pronto todo se trata de tenerlos a ellos dos juntos en un mismo espacio, una oficina, cuatro pareces, íntimamente reducido, cosa que atormenta en sobre manera a Nathaniel, desde que Adler llego, insistió en que Alessandra y él tenían derecho a la privacidad, y por ende podía cerrar la puerta de la oficina todo el día si se le daba la gana, y Nathaniel harto de pelear contra algo que creía una causa perdida, acepto su petición sin rechistar
Nath
