○○◘◘••♥♥••◘◘○○ Los malestares del embarazo han empezado con más insistencia durante la última semana y cada vez es más difícil ocultar mis síntomas de Bastian, pero hasta el momento lo he logrado, porque lo que menos quiero es, que se entere de que vamos a ser padres, por medio de una videollamada, sin poder tocarnos y festejar juntos. —Laureen, hija. ¿Cómo amaneces? —me pregunta mi padre, mientras entra en mi parte de la habitación del hotel y trae su cabello desordenado, pues se nota que acaba de despertar. —Kalimera —lo saludo sonriente y palmeo el lado izquierdo de la cama, para que se siente a mi lado, cosa que no demora en hacer —. Este frijolito, amaneció inquieto —bromeo, al tiempo que me recuesto en la cama, pues acabo de llegar del baño, tras devolver la poca comida que me q