○○◘◘••♥♥••◘◘○○ Suelto una carcajada cuando Bastian me levanta en brazos y prácticamente sale corriendo conmigo hacia el interior de la habitación. Espero que me lleve a la cama, pero no lo hace, sino que camina hacia una cómoda, que está frente a la cama y me sienta sobre esta. Yo permanezco con mis manos cruzadas detrás de su cuello y muerdo mi labio cuando se separa de mí y veo sus ojos ardiendo en deseo. —Eres mi diosa —dice con voz ronca, mientras me regala una mirada, que me hace estremecer completamente. —Bésame —le pido y no me hace esperar, pues ataca mi boca con deseo y desenfreno. Revuelvo su cabello, mientras disfruto el sentir su lengua invadiendo mi boca. Suelto algunos gemidos ahogados y sus manos viajan rápidamente bajo mi blusa, la cual va abandonando mi cuerpo lentam