○○◘◘••♥♥••◘◘○○ Veo la hora en mi celular y finalmente han pasado los diez minutos, pero Bastian no regresa, lo que me hace preocupar, pues pudo haber pasado algo grave con el yate. Abro la puerta y antes de bajarme, reviso que no se me quede algo y me bajo. Camino apresurada atravesando el parqueadero, hasta que llego al camino de madera, que me lleva al muelle. A lo lejos alcanzo a ver una zona muy iluminada y recuerdo que ahí es en donde el yate se encuentra, por lo que imagino que tienen algunas luces encendidas. Mi teléfono suena, por lo que miro la pantalla a ver si es una llamada de Bastian, pero es de la casa, así que me apresuro en contestar. —¡Mami! —grita mi pequeña al otro lado de la línea. —Mi princesa, ¿pasó algo? ¿Estás bien? —pregunto ansiosa, mientras camino concen