simón
Después de la proyección, Michael decidió acompañarme de regreso a mi casa. Había pasado un tiempo desde que estábamos juntos y ésta parecía la oportunidad perfecta.
"Oye", me dijo suavemente mientras nos sentábamos juntos en el sofá.
"Oye", le susurré en respuesta, moviéndome para recostarme contra su pecho.
Besó la parte superior de mi cabeza y me abrazó contra él.
"Te he extrañado", dijo. "Todo ha sido realmente una locura últimamente".
"Lo sé", suspiré, girándome para poder mirarlo. "Y no hemos tenido la oportunidad de hablar sobre... cosas".
“Cosas", repitió. “¿De qué cosas deberíamos hablar?
Tragué fuerte, sin siquiera estar seguro de cómo empezar la conversación. Una cosa era cuando solo estaba Rob. De hecho, la última vez que hablamos de ello, Rob era sólo un tal vez.
