[Andrea]
- ¡Lucky! ¿Dónde estás metido, pequeño? – estoy en mi apartamento jugando con el mejor regalo que me pueden haber dado en la vida.
Mi cumpleaños ya fue hace tres meses, pero creo que la celebración de mis 25 años no se me olvidará nunca y no es solo por cumplir un cuarto de siglo, sino porque una cosita peluda y pequeñita llegó a mi vida ese día y de inmediato de ganó mi corazón.
Ese día, Andrés salió apresurado de su casa, creo que la excusa de irse fue que tenía que solucionar una cosa del trabajo, algo que me pareció normal porque aún seguía sin asistente, ya que hasta ese lunes yo empezaría a trabajar con él.
Me quedé metida entre la cama y sin darme cuenta me volví a quedar dormida, estaba muy contenta, pero no podía negar que muy cansada por la forma tan
