Narra Anna Bajé del auto con sumo cuidado de no pisar el vestido con los tacones. Los flashes de las cámaras me segaron la vista, Leandro me tomó por la cintura acto que llamó la atención de los reporteros que al instante lo abordaron de preguntas. ¿Son pareja ó sólo es una de sus conquistas, Señor Cipriani? ¿Qué se siente estar con el hombre mas millonario del mundo, señorita? ¿Se van a casar?... >Esas eran algunas de las tantas preguntas que hacían. —Sólo les diré que ella es mi novia.Por el momento —susurró lo último. Sonrió hipócritamente y me haló hacia adentro —dentro de una semana será mi esposa. —Creo que no te escucharon, lo han de haber tomado a mal —reí una vez estábamos lejos de la prensa. —Bueno, en realidad no me importa lo que digan —respondió encogiéndose de hombr