CALEB. El sonido de la puerta al cerrarse me sumerge en un silencio absoluto. Debería sentirme satisfecho. Es lo que tenia previsto desde un principio. Sin embargo, lo que no tenía previsto era sentirme como me siento en este momento. Maya se fue sin siquiera dirigirme la palabra. Ella solo me vio con sus ojos muy abiertos mostrándose vulnerable, asustada. Por otro lado, Mia también se marchó. Nunca había pedido nada a nadie y, sin embargo, ella se fue. ¿Puedo culparla? Sería hipócrita de mi parte hacerlo. Tome decisiones, ahora es tiempo de lidiar con las consecuencias y retomar mi vida. ⭐⭐⭐⭐ ¿Cómo es posible que podamos llegar a detestar lo que somos? Sentirnos miserables a pasar de saber que las decisiones que tomamos nos parecen las correctas. ¿Es posible que el silencio que